Más de 360 mil tabasqueños afectados por las inundaciones, hay que organizarse ante el abandono del gobierno federal.
Ciudad de México.- Ante los efectos destructivos de las inundaciones recientes en Tabasco, el líder nacional del Movimiento Antorchista, Aquiles Córdova Morán, condenó que el gobierno del presidente, Andrés Manuel López Obrador, no tenga como preocupación central atender los devastadores daños que mantienen a más de 368 mil tabasqueños afectados; por lo que es urgente la realización de obras de infraestructura para atacar de fondo las inundaciones que año con año se presentan y que en este 2020 no atendió el gobierno federal.
“Este sexenio que prometió ser el de los pobres, el de “los de abajo”, la inundación no parece ser una preocupación central. Ni proyecto ingenieril para atacar de fondo el problema, ni ayuda directa e inmediata para aliviar la penuria de los más humildes y necesitados”, dijo el líder social sobre la falta de apoyos a los damnificados.
Córdova Morán afirmó que la inundación de 2020 es la más ignorada y desatendida por el gobierno actual, aspecto que han podido constatar con los esfuerzos que activistas de su movimiento han realizado en el terreno mismo de la tragedia, además del testimonio de habitantes, quienes refieren que no existe ningún tipo de apoyo, desde despensas, ropa, cobijas, zapatos, medicinas de uso corriente, incluso, las fuerzas armadas, -las únicas que andan en campo-, están trabajando con “las puras uñas a falta de recursos”.
Al hacer un recuento de los principales daños que han sufrido los tabasqueños, el líder social indicó que la pérdida más dolorosa para las familias es la de las propias viviendas, muchas de las cuales están sufriendo daños de todo tipo que las hacen inhabitables. Ante ello, la familia queda a la intemperie, aunado a la incertidumbre al no saber cómo levantar nuevamente la vivienda destruida por el agua.
Reconoció que, si bien los efectos corresponden a un desastre natural, un fenómeno recurrente, cuando se presentan lluvias torrenciales, ciclones o tormentas tropicales que rebasan la capacidad de las presas o el caudal que normalmente llevan los ríos de la zona, la lucha ante los efectos destructivos de las inundaciones puede y debe darse con buenos resultados, tanto para erradicarlos de manera definitiva como para hacerlos más tolerables en el corto plazo.
En ese sentido, ayudar a la población afectada a sobrellevar la situación exige que los gobiernos estatal y federal destinen recursos y dispongan de un inventario detallado de las necesidades más comunes y urgentes que suelen presentarse en cada inundación, asegurar la disponibilidad oportuna y en cantidad suficiente de los insumos necesarios para atenderlas, así como un plan de las distintas formas y rutas para hacer llegar la ayuda a quienes realmente la necesiten.
Sobre la erradicación definitiva de las inundaciones, el líder social indicó que la tarea debe encargársela a un equipo de especialistas competentes para estudiar el problema y proponer la solución técnicamente fundamentada. “La vida y la seguridad de los humildes nunca han estado en el primer plano de interés de los Gobiernos de la república” dijo sobre la falta de presupuesto para concretar los esfuerzos realizados en sexenios anteriores con la elaboración de planos y cálculos técnicos de las obras para controlar eficazmente las inundaciones.
Llamó a los tabasqueños para organizarse, pues ante la magnitud de la tragedia se hace sentir la falta total de la voz del pueblo que, dirigido al resto del país, pueda informarle de su situación a la nación entera y pedir su ayuda solidaria. Reconoció que en México existe un pueblo solidario, sin embargo, no encuentra el camino, el conducto, para tender la mano a los tabasqueños, pues ya no quieren hacerlo a través del gobierno, que lo ha utilizado para promocionarse, así como políticos que han lucrado con la tragedia.
Por ello propuso la constitución de comités en cada colonia o comunidad que se encarguen de acopiar material, recursos, alimentos, elijan el lugar más adecuado para ubicar los refugios y que tenga todo listo en caso de una nueva emergencia, al tiempo que conformen a un comité estatal único que sea la voz ante el país, e incluso ante fundaciones extranjeras, para solicitar apoyo y las obras de infraestructura necesarias.
“Ahora ya sabemos que es posible una solución definitiva a nuestro problema y debemos luchar por alcanzarla. Pero estemos claros que no llegará sola, que no llegará nunca si ustedes no la exigen a una sola voz y como una sola fuerza. Los derechos no se obtienen con súplicas; se conquistan con la fuerza organizada de las mayorías. También para eso urge organizarse” finalizó el líder social.